Hasta hace muy pocos años era de extrañar escuchar hablar tanto de
apuestas deportivas en nuestro país. La más que famosa Quiniela era de los pocos sorteos deportivos que contaban con una gran tirada de personas asiduas a las
apuestas online.
Con la llegada de Internet llegaron las grandes casas de apuestas virtuales. Estas permiten apostar por variedad de eventos: apuestas de futbol, apuestas de caballo, carreras de galgos, apuestas de baloncesto y en algunas incluso apuestas sobre política, Gran Hermano y cualquier tema susceptible de generar apuestas.

Los cambios legislativos en algunas comunidades autonómicas como Madrid ha posibilitado la aparición de casas de apuestas al más puro estilo inglés. Para apostar en estas
casa de apuestas es tan sencillo como acercarse a una de sus sucursales, pedir el boleto deseado y hacer la apuesta ahí mismo. Una de las casa de apuestas como las explicadas es Sportium. Cuenta con más de 90 locales en la comunidad de Madrid para que nadie se quede sin una cerca. El negocio de las
apuestas se rige bajo legislaciones estrictas que controlan las licencias y el negocio generado a rajatabla para evitar problemas mayores, ya que algunas de las
casas de apuestas, de Internet o presenciales, se están haciendo de oro con este tipo de negocio tan simple como es el juego de azahar aplicado al deporte.
Sin duda el deporte por excelencia es el fútbol en nuestro país, y las apuestas futbol son las que más jugadores tienen. El baloncesto, la liga ACB y la NBA, gracias a Gasol, Rudy y compañía también se llevan buenas cifras de apostantes.