Son rentables, siguen creando puestos de trabajo pese a la crisis, ayudan a sus empleados a conciliar su vida personal, familiar y laboral y apuestan por la igualdad más allá de lo que obliga la ley. Tengan 50 o más de 1.000 empleados, estos rasgos son comunes en las 50 mejores empresas para trabajar, según la lista “Best Workplaces España 2010”, elaborada por el instituto Great Place to Work.
- De diferentes sectores y tamaños. De las 50 mejores empresas, seis tienen entre 50-100 empleados, 12 entre 100 y 250 empleados, 13 entre 250-500 empleados, ocho entre 500-1.000 empleados y 11 más de 1.000 empleados. Además son de todo tipo de sectores: moda, tecnologías de la información, farmacéutico, seguros, alimentación, bricolaje… Esto pone de manifiesto que ser de las mejores no está reñido ni con el sector de actividad ni con el tamaño de la empresa.
- Bajo absentismo. El índice de absentismo de las 50 empresas es del 1,94%, frente a la media nacional que es del 4,17%.
- Premian la innovación. Tengan sólo 50 empleados o incluso más de 1.000, en ellas cualquier empleado puede evaluar a sus jefes, aportar sugerencias, compartir cualquier tipo de información, duda o inquietud… y los jefes están accesibles y son especialmente receptivos ante cualquier nueva idea que se quiera aportar. De hecho, el 81% de los empleados de las mejores empresas destacan que sus jefes son accesibles y que es fácil hablar con ellos.
- Son flexibles. Se destierra la idea de que para trabajar es imprescindible ir a la oficina. Los empleados tienen horarios flexibles y tienen un amplio margen para decidir sobre las horas de entrada y salida. Nueve de cada 10 de los empleados de estas empresas consideran que sus jefes confían en que harán un buen trabajo sin necesidad de vigilarles y aprecian especialmente que les den espacio y libertad para desarrollar las funciones de su puesto.